TODA UNA VIDA EN UNA NOCHE Sofía Basalo
www.TeatroMundial.com , Madrid
No se debe simplificar las relaciones materno filiales. No se debe buscar culpables o víctimas. Todos interpretamos ese papel en algún momento y de alguna manera. No hay escuelas de padres, y el bien y el mal, lo bueno y lo malo, son conceptos tan subjetivos que jamás podremos encontrar la unanimidad en unos comportamientos tan poliédricos y, también, tan discutibles.
Jessie y su madre, Olivia (Remedios Cervantes y Carmen de la Maza) son las protagonistas de una noche definitiva. En esas horas intentarán vivir todas las noches, todos los días, todas las tardes de silencios entre una madre y una hija que se han querido, se han necesitado sin saberlo... quizá lo sabían, quién sabe.
Jessie padece epilepsia. Una enfermedad que ha marcado su vida. Que marca su presente solitario. Olivia jamás amó a su marido, tal vez sobreprotegió a su hija envolviéndola en una piadosa mentira que la hizo desgraciada, tal vez necesite a su hija más de lo que cree... aunque nos dé la sensación de que abusa de ella en el imperioso afán de hacerle olvidar para qué sirve una pistola...
Ambas mujeres han compartido frustraciones, culpabilidades, deseos, miedos... todo ello en la más absoluta soledad... es curioso, como escribe Margarita Rojas, cómo somos capaces de compartir el tiempo, nuestros pasos a través del tiempo... sin saber qué sentimos, qué nos duele, qué nos amarga, cuáles son nuestras necesidades y quiénes son aquellos que pueden curarnos las heridas que nos mueven a apearnos de un autobús que no somos capaces de conducir... es curioso cómo podemos pasar por la vida escondiéndonos de nosotros mismos, de nuestra realidad, de nuestro dolor. Así vive Olivia, instalada en la frágil superficie de un universo dolorosamente profundo... tan profundo cómo la renuncia consciente y decidida de su hija. Esposa fracasada, madre fracasada, mujer fracasada, quizá.
La familia es un accidente irreversible, le dice Olivia, en una ocasión. Se ha de aceptar sin más. Los componentes de esa familia tampoco eligieron estar a nuestro lado. No han de gustarnos. Son, simplemente... quizá Jessie se ha cansado de Ser... o se ha cansado de que le impidan Ser, a causa de una enfermedad que, como la familia, ha sido un accidente irreversible...
En esa noche Olivia y Jessie hablan, beben chocolate, intentan comprenderse, ríen, se perdonan y exponen sus porqué... aunque se suele decir que la intención es lo que cuenta... hay veces que ni esa intención puede impedir que una persona detenga, antes de tiempo, su trayectoria vital.
El texto de Marsha Norman es intenso, íntimo... pero sobre todo, intenso. Buena elección, la de Remedios Cervantes y Carmen de la Maza, para arriesgarse y subir nuevamente al escenario a las órdenes de Gerardo Malla.
Ambas actrices resuelven aceptablemente sus personajes. Carmen de la Maza, es sin duda, una intérprete con una trayectoria dilatada y solvente; por su parte, Remedios Cervantes tiene ante sí un futuro interesante. Después de varios años y varios trabajos podemos comenzar a apostar por ella, por su seriedad y afán de superación.
_____________________
BUENAS NOCHES, MADRE.
Teatro Arlequín.
Autora: Marsha Norman.Adaptación: Miguel Sierra.Dirección: Gerardo Malla.Intérpretes: Carmen de la Maza y Remedios Cervantes.
